En la actualidad está ocurriendo una serie de cambios vertiginosos en todos los campos y el de la sociedad no podía quedarse atrás.
El número de personas solteras en décadas atrás además de ser reducido era mal visto ya que se hacía alusión a la homosexualidad masculina o femenina predominantemente, más que a otro tipo de no atribuciones físicas.
En la actualidad las cosas han cambiado y algunas estadísticas hacen referencia el 39% de solteros en países como chile seguidos de corea del sur y en México con el 33% al contrario, otros países como nueva Zelanda hablan de un 16% por mencionar algunos países.
Los cambios económicos y el desarrollo personal se han convertido en prioridad para esta nueva generación dejando en segundo término la relación de pareja formal y en definitiva hasta el ul timo lugar paternidad y/o maternidad ya que se ha hecho más consciencia de lo que esto conlleva.
Algunas de las justificaciones aparte de las mencionadas como desarrollo y crecimiento personal profesional, existen otras como mantener la libertad en tiempo y decisiones, menos gastos y aunque ya hay solteros de a dos en la cual deciden no tener hijos, también están los divorciados y los que han quedado viudos.
Pero que es lo hay detrás de todos esto?
En la mayoría de mis consultantes lo que he descubierto es básicamente una expectativa demasiado elevada hacia la pareja lo que hace que la frustración aparezca con facilidad decepcionando a las personas y que muchas veces los haga decidir vivir solteros como dice el dicho “más vale solo que mal acompañado”.
Otra de las observaciones que descubierto es la falta de compromiso, la mayoría de los consultantes solo desean pasársela bien, pero cuando los problemas aparecen tienen a alejarse de la relación, Es decir solo se involucran.
En definitiva no existe la pareja ideal, todos tenemos colita que nos pisen algunos tiene cola de dinosaurio, otros cola de león y hay quien tiene la cola de ratón pero todos tenemos lo nuestro, entonces , podemos pasarnos la vida justificándonos o tomar la decisión que consideremos adecuada.
Vivir en pareja es un verdadero compromiso siempre y cuando tengamos claro qué tipo de pareja es con quien deseamos compartir nuestra vida.
Para que puedan facilitarse las cosas es necesario tener una comunicación clara, directa y asertiva, un objetivo claro breve y concreto de pareja en el que ambos estemos de acuerdo, un objetivo claro y concreto sobre realización personal y un objetivo claro sobre el porqué tener hijos y como los vamos a apoyar para que realicen su sueño.
Cuando hay una armonía en esos tres objetivos podemos recorrer el camino más fácilmente, cada días que pase, la economía mundial se irá moviendo y podemos decidir vivir en la soltería sí , claro que sí, pero ha pensado cuanto tiempo le va a servir su cuerpo para valerse por sí solo?.
Vivir en pareja no se trata de conveniencia para que alguien haga mis cosas, definitivamente no, es el arte de compartir, todo lo que pueda compartir.
Las estadísticas no mienten las personas que viven en soltería tienden a deprimirse con mayor facilidad, el alcoholismo y las adicciones aparecen con más facilidad pocos son los que realmente acumulan riqueza económica, pero si generan mayores gastos porque tienden a enfermarse más.
A menos que tenga el habito de echarse un clavado dentro de sí mismo en forma cotidiana seguramente puede alcanzar la iluminación y no tan solo vivir en la soltería sino hacer de ella un gran servicio a su comunidad y al mundo entero haciéndolo cada día mejor con aportación ya sea en investigación o en el más humilde de los puestos pero siempre tendiente a ser un mejor ser humano.
Si usted es de estos últimos le deseo mucha suerte y que la felicidad le acompañe siempre, si no es así y también ha tomado esa decisión está bien, solo lo invito a que se vea a usted mismo en 20, 30 o 40 años más y si no le gusta como se ve puede cambiar de opinión.
Hasta la próxima.
Dr. Fausto Gerardo Rosas Nepomuceno
Psicoterapeuta Familiar y de Pareja